QUÉ BUSCAN LOS LECTORES

Saber qué buscan los lectores no es algo sencillo. Los gustos, el bagaje cultural de cada uno influyen irremediablemente en la inclinación del lector hacia uno u otro título. Sin embargo, hay otros factores que se tienen que tener en cuenta y hay que trabajar sobre ellos.

Una buena portada es la primera impresión que se llevará el potencial lector, una imagen dicen que vale más que mil palabras y la elección de la portada no ha de tomarse a la ligera. Dejarse aconsejar y orientar por profesionales es indispensable.

Lo mismo ocurre con la sinopsis, el primer texto que leerá el lector de nuestra novela. Tiene que ser escrito con esmero, desvelando lo justo como para crear necesidad pero sin ser tan excesivo como para que no queden ganas de leer más.

Por último y no menos importante, la corrección. Todo texto tiene que ser sometido a un exhaustivo trabajo de corrección y revisión. Este aspecto que aparentemente no tiene consecuencias graves, sí las tiene pues aún siendo un libro trabajado de buen contenido hay errores que harán que el lector cambie sus impresiones sobre el mismo.

Pero, por encima de todo, los lectores buscan respeto por parte del autor y este respeto comienza ofreciéndoles un buen libro, un libro distinto que poder recomendar a amigos y conocidos. Un libro bien elaborado que consiga captar su atención desde el primer momento y que sea capaz de transmitir emociones y sensaciones; que invite a vivir sin salir del sofá o del asiento de un tren.

Cuidemos las formas mediante una buena edición y cuidemos el fondo recurriendo a temas y contenidos originales perfectamente desarrollados por el autor, que debe comprometerse desde las primeras líneas con un lector cada vez más exigente y preparado.

Por todo ello es importante e indispensable trabajar con profesionales especializados.